TURNAROUND MANAGEMENT: Nueva herramienta de control de riesgos en cartera comercial

Turnaround Management es una rama en las áreas de la Administración y Gobierno Corporativo que examina las causas de una crisis empresarial y propone los cambios necesarios para corregir aquellos elementos o situaciones que la han provocado. En USA es común ver consultores como “turnaround managers” al interior de empresas con algún grado de dificultad o administrando una situación de insolvencia. Su misión es tomar las medidas que permitan a la empresa salir de una crisis financiera y volver a ser una empresa rentable para sus accionistas.

Lo ideal es detectar tempranamente aquellas señales que podrían estar indicando un problema de liquidez en la empresa o entender los grandes drivers financieros en cash-flow proyectado, que pudiesen apuntar a un problema que se viene encima. Si podemos diagnosticar una situación de riesgo de liquidez en la empresa de forma temprana, entonces es mucho más sencillo tomar las medidas correctivas para evitar el colapso de pagos.

Es en este punto cuando la figura de un profesional externo, experimentado y especialista pasa a ser la solución al problema. Dependiendo del caso, el profesional externo en Turnaround toma temporalmente la posición del gerente Financiero, del gerente de Ventas, gerente General o eventualmente el presidente de la Junta. Actúa desde el interior de la empresa con el fin de corregir rápidamente los aspectos que están provocando la crisis.

Los acreedores financieros muchas veces presionan por la entrada de un profesional en Turnaround cuando experimentan continuos incumplimientos en los términos de los préstamos vigentes como condición para no acelerar los créditos y evitar así el inicio de un proceso de cobro ejecutivo. Otras veces es la misma junta de accionistas la que recomienda la contratación de un gerente General o presidente temporal para hacer frente a una situación financiera preocupante.

Ante el requerimiento de nuestros clientes o de algún acreedor por incorporar un especialista en Turnaround, nuestra banca de inversión se inclina por contratar a un profesional experimentado - muchas veces ya retirado -  para hacerse cargo de la situación. Se entiende que su función está cumplida una vez que la compañía vuelve a arrojar resultados en azul y se normalizan sus resultados financieros. En nuestra experiencia, en un gran porcentaje de los casos intervenidos por un especialista, la empresa es capaz de normalizar su operación después de unos meses.

Etapas en el proceso de Turnaround

Hay cinco etapas en el proceso de Turnaround: Cambio de Gestión, Análisis de la Situación, Plan de Emergencia, Reestructuración Comercial y Regreso a la Normalidad. Veremos estos individualmente para comprender qué debe ocurrir en cada etapa.

Cambio de Gestión:

Por regla general ante situaciones serias, es muy importante seleccionar un CEO o presidente que pueda liderar exitosamente el cambio. Este individuo debe tener un historial probado y la capacidad de reunir un equipo ejecutivo que tenga la capacidad de implementar las estrategias para cambiar el rumbo de la compañía. Este ejecutivo a menudo proviene del mercado y trae un conjunto especial de habilidades para hacer frente a la crisis y el cambio. Su trabajo será estabilizar la situación, implementar planes para transformar la empresa, para finalmente contratar a su reemplazo. Frecuentemente, el nuevo gerente general decide reemplazar a algunos o a toda la primera línea de vicepresidentes.

Análisis de la Situación:

En esta etapa objetivo es determinar la gravedad de la situación y si puede ser solucionada. Se debe responder a preguntas como ¿Es viable el negocio?; ¿Puede sobrevivir?;  ¿Debería continuar el negocio o ser liquidado?; ¿Hay efectivo suficiente para ejecutar un plan de Turnaround?;  Este análisis debe culminar con la formulación de un plan de acción preliminar que indica lo que está mal, cómo solucionarlo, estrategias clave para cambiar la dirección del negocio  y una proyección de flujo de efectivo (al menos 20 semanas) para comprender las eventuales necesidades de recursos en el muy corto plazo. La estrategia diseñada, debe continuar con planes de acción y un planteamiento de objetivos detallado. Con demasiada frecuencia, los objetivos están desalineados lo cual causa confusión en el equipo y una gran pérdida de energía. Muchos de los buenos empleados ya se han ido de la empresa y se tendrá que trabajar con los vicepresidentes para detectar que puestos claves deben ser reemplazados por talento externo.

Plan de Emergencia:

El objetivo es controlar la situación y mantener un control estrecho de la escasa caja o efectivo de la compañía. Nuestra recomendación es la de centralizar la función de pagos en un claro responsable. Si detiene el sangrado de efectivo, entonces tendrá tiempo suficiente para implementar el plan. Proteja el valor de la empresa demostrando que el negocio es viable y los problemas son sólo temporales. Debe recaudar dinero en efectivo de inmediato. Revise el saldo de las fuentes internas de efectivo tales como cuentas por cobrar y renegocie los pagos de préstamos y cuentas por pagar. Venda unidades comerciales no rentables, bienes inmuebles, activos improductivos. Consiga en la medida de lo posible nuevos créditos con garantía de activos.

Reestructuración Empresarial:

El objetivo de esta etapa es crear rentabilidad. Es normalmente necesario reestructurar el negocio para aumentar ingresos, controlar costos, elevar la rentabilidad y el rendimiento de los activos e inversiones. Dadas las restricciones de efectivo no siempre es posible realizar modificaciones radicales al mix de productos, por lo que muchas veces es necesario implementar planes muy livianos en términos de nuevas inversiones. Es necesario revisar la estructura de capital de la empresa y renegociar la deuda a corto y largo plazo. Debe implementar un MIS tal de asegurar un adecuado seguimiento y administración de ingresos y costos en cada unidad de la empresa.

Regreso a la Normalidad:

El objetivo es institucionalizar los cambios en la cultura corporativa para asegurar márgenes, ROI, y ROA;  busque oportunidades en el mercado para lanzar nuevos productos y ejecutar un crecimiento rentable; mejore el servicio al cliente y las relaciones laborales; desarrolle una gestión continua, programas de capacitación y desarrollo de empleados para aumentar el calibre de su capital humano. Este podría ser un momento para reestructurar el financiamiento a largo plazo a tasas más bajas de las que obtuvo hace unos meses cuando estaba en distress financiero. Ahora la compañía nuevamente es estable y en camino al crecimiento. Se hizo el Turnaround.