LA FIDUCIA Y LOS NEGOCIOS DE CARTERA
El vehículo fiduciario tiene más de 2.000 años de historia, y básicamente es una herramienta diseñada para generar confianza a quienes participen en él.
Una de las virtudes de estos negocios es su diversidad, en la medida en que cada negocio fiduciario es estructurado de acuerdo a las necesidades de los participantes, lo que genera que si se decide participar en un negocio que involucre fiducia, se deba analizar el contrato fiduciario y entender con claridad su finalidad, a qué título se participa y las responsabilidades y beneficios que se tiene.
De acuerdo con la información, publicada por la Superintendencia Financiera de Colombia, a corte del mes de abril de 2023 existen 27 fiduciarias, las cuales administran activos por $653.8 billones de pesos en 26.158 fideicomisos y han generado utilidades por $354.282 millones. Por tipo de negocio, en los activos administrados por las sociedades fiduciarias la mayor participación la tienen los negocios fiduciarios con el 73.8% del saldo total, seguido por los Fondos de Inversión Colectiva FIC (12%).
Por lo general los negocios fiduciarios de cartera pueden ser fondos de Inversión o patrimonios autónomos de inversión o de garantía con cartera y aunque su estructuración pueda variar, su finalidad es la de garantizar el pago de un dinero a inversionistas o prestamistas.
Con esta finalidad, lo más recomendable es que la administración de la cartera la realice directamente la fiduciaria como vocera del fideicomiso, esto asegura que el activo que origina la cartera sea del fideicomiso, que los recaudos ingresen directamente a la fiducia, que la aplicación de cartera se haga a cada activo y que la calificación de la misma sea la que corresponda a la realidad, de esta forma los beneficiarios a través de los informes que debe generar la fiduciaria, podrán conocer exactamente el activo que respalda su dinero.
Ahora bien, en los fondos de capital privado y en algunas titularizaciones administradas a través de fideicomisos, existe la figura del gestor o del operador, quién es la persona que técnicamente conoce la operación del activo del fideicomiso y que puede tomar las decisiones de inversión, convirtiéndose el fideicomiso en el vehículo a través del cual se hace posible la realización del negocio, la figura del gestor y/o operador también puede existir en los fideicomisos de cartera sin embargo, la actividad del fiduciario no es pasiva, existen aspectos que debe analizar como:
Los anteriores aspectos son entre otros los más importantes que se deben tener en cuenta al estructurar este tipo de fideicomisos, un buen análisis de estos aseguraría que el negocio fiduciario cumpla con su finalidad.
Entendiendo al Sector Fiduciario
• Fondos de terceros administrados por dichas sociedades (AUM)
• Activos que están bajo Custodia (AUC)
• Fondos Voluntarios de Pensión (FVP)
• Recursos de la Seguridad Social (RSS)
• los Fondos de Inversión Colectiva (FIC)